En el centro de la Ciudad de México, muy cerca de la Alameda Central, un portón tradicional de la arquitectura china está colocado en la esquina donde se encuentran las calles Juárez y Dolores.
Este portón señala la entrada al Barrio Chino de la CDMX. Si bien es considerado uno de los más pequeños del mundo, en tan solo un par de calles es posible encontrar una amplia oferta de gastronomía, productos especializados e importaciones provenientes del gigante asiático.
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En este lugar conviven de forma armónica dos culturas, las cuales han encontrado la manera de combinarse para dar origen a cientos de mestizajes culturales de los que podemos ser testigos.
Foto: Edgar Silva Fuentes S.
La comida es una de esas mezclas que China y México han tenido para sorprender al mundo con aromas, sabores e ingredientes que a pesar de la distancia geográfica se encuentran más cerca de lo que se podría pensar.
Los fideos son uno de los ingredientes principales de la gastronomía asiática, los hay de todas formas y tamaños, planos, redondos, rizados, cortos, medianos, largos, de harina de arroz, de trigo, integrales, entre muchos otros.
Foto: Edgar Silva Fuentes S.
Comúnmente se pueden encontrar en platillos con una gran variedad de vegetales y carnes, soya y algún acento dulce o picante, así como en cuencos con caldo caliente y alguna proteína para darle consistencia a la mordida.
Sobre la calle de Dolores, hay un pequeño spot donde puedes encontrar una versión muy mexicanizada de los fideos. En una mesa, frente a los restaurantes, los fideos se hierven hasta obtener la cocción, se escurren y dejan secar para después introducirse en una olla de aceite muy caliente.
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La fritura de los fideos genera que estos se inflen, lo que les da una textura crujiente y aireada, perfecta para una botana. Como es de imaginarse, puede agregarse soya y salsa de chile fermentado, aunque el ingenio mexicano ha ido más allá cuando se trata de sabor.
Foto: Edgar Silva Fuentes S.
Si alguna vez has visto un carrito de papas por las calles de tu ciudad, es probable que conozcas esas papas fritas y cubiertas por polvos de distintos colores. Este mismo giro fue el que le dieron a los fideos fritos, pues puedes pedirlos espolvoreados con sabores como queso, chipotle e incluso en famoso sabor “fuego”.
Además del toque picante de estos polvos saborizantes, los sabores y la textura hacen de este uno de los snacks más buscados en el Barrio Chino, por la similitud con las frituras con las que los mexicanos hemos crecido y su empaque listo para llevar.
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