5 recetas árabes, un mundo de sabores por explorar

2022-08-21 07:21:51 By : Ms. Lydia Wu

Diez Minutos participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Diez Minutos recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.

Sorprende a los tuyos con unos platos muy exóticos, llenos de sabor y color con los que quedarán gratamente satisfechos. Ponte manos a la obra y ¡bon appetit!

Si te gusta sorprender a los tuyos en la mesa, esta semana te proponemos hacerlo con la cocina árabe. ¿Te atreves a prepararles cinco platos típicos, llenos de sabor y muy saludables? La cocina árabe es rica en aromas y sabores, principalmente por la utilización de multitud de especias que le dan ese toque exótico tan característico.

Por lo demás, su cocina no dista tanto de la mediterránea en cuanto a la utilización de materias primas. Las verduras, legumbres y frutos secos están presentes en la mayoría de sus platos. Así como el arroz, un complemento fijo en casi todas sus recetas. El pollo y el cordero figuran entre sus carnes favoritas y el pescado es menos común.

Para iniciarte en la cocina árabe te proponemos 5 platos muy ricos con los que os chuparéis los dedos. Además, son supersencillas de hacer: hummus con comino; filetes de pollo harissa y judías verdes, ensalada de espinacas, garbanzos crujientes y yogur; batatas asadas con labneh de ajo y cebolleta y panecillos turcos rellenos. Suenan deliciosos y saben mucho mejor. Toma nota porque te enseñamos a prepararlos paso a paso. ¡Buen provecho!

200 g de garbanzos; 1/2 cucharadita de carbonato sódico; 2 dientes de ajo, perejil fresco; 1 guindilla; 1 hoja de laurel; 1 limón; 120 g de tahini (pasta de sésamo); 1 dl de aceite de oliva virgen extra; 1 cucharadita de comino en polvo; sal y pimienta roja.

Pon en un bol los garbanzos, el bicarbonato y cubre con agua fría. Deja hidratar toda la noche.

Escurre los garbanzos. Ponlos en una cazuela con un ajo aplastado, el laurel, un poco de guindilla y un pellizco de sal. Cubre con agua y deja cocer a fuego lento hasta que los garbanzos se empiecen a deshacer. Ir añadiendo agua para que no se queden secos. Escúrrelos, reservando un poco de líquido de la cocción.

Exprime el limón. Pela y ralla un ajo. Pon en vaso de batidora los garbanzos, el tahini, el zumo de limón, el comino y el aceite de oliva. Tritura con la batidora al tiempo que añades poco a poco el agua de cocción de los garbanzos hasta obtener una crema espesa. Sirve con un buen chorro de aceite, perejil picado y pimienta roja.

4 filetes de pollo; 4 cucharadas de harissa (salsa picante tunecina); 1 cebolla; 150 g de judías verdes redondas; 150 g de cherry; aceite de oliva; sal y pimienta.

Primero precalienta el horno a 200º C. Salpimenta los filetes de pollo (pueden ser de pechuga o de contramuslo) y pinta con salsa harissa. Enrolla y cierra con un palillo.

Pela y corta la cebolla en rodajas. Pon en una bandeja de horno las rodajas de cebolla y sobre éstas, los rollos de pollo. Pinta todo con aceite de oliva y mete al horno precalentado durante 30 minutos.

Mientras tanto: en un bol, pon una cucharadita de harissa y dos de aceite de oliva junto con las judías verdes y los tomates cherry. Salpimenta y remueve todo. Diez minutos antes de retirar el pollo, mete las verduras al horno y mantenlas hasta el final. Sirve el pollo con las judías y los tomates.

300 g de espinacas frescas; 300 g de garbanzos cocidos en conserva; 2 yogures naturales; 1 limón; 1 cucharada de ras el hanut (especias marroquíes); aceite de oliva y sal.

Precalienta el horno a 200º C. Lava y seca los garbanzos cocidos. Ponlos sobre la bandeja de horno y hornea durante diez minutos, removiendo varias veces. Retira.

Mezcla en un bol dos cucharadas de aceite de oliva, el zumo de medio limón y una cucharada de ras el hanut (especias marroquíes). Añade los garbanzos y revuelve para que se impregnen con la mezcla. Vuelve a meter al horno diez minutos más o hasta que queden crujientes. Retira y reserva.

Haz el zumo del otro medio limón. Mezcla los yogures con el zumo de limón, una pizca de sal y un poco de aceite de oliva. Mezcla todo. Sirve las espinacas limpias y, encima, los garbanzos y el aliño de yogur.

4 batatas; 1 cebolleta, 2 yogures griegos; 1 cucharadita de ajo en polvo; eneldo seco y sal.

Pon en un colador grande (sobre un bol) los dos yogures con el ajo en polvo y una cucharadita de sal. Tapa con un paño y deja en la nevera 48 horas para que el yogur pierda el suero y adquiera consistencia (esto es el labneh).

Precalienta a 200º C el horno. Lava bien las batatas y frota con sal y eneldo. Mete al horno, previamente calentado, de 30 a 40 minutos, hasta que las batatas estén tiernas y su piel empiece a oscurecerse. En ese punto, retira del horno.

Calienta una parrilla a fuego fuerte y pon las batatas hasta que la piel quede parcialmente carbonizada. Retira. Abre ligeramente las batatas y pon encima una cucharada de la mezcla de yogur y la cebolleta cortada en rodajas finas.

400 g de harina de fuerza; 2,4 dl de agua; 8 g de levadura fresca; 200 g de espinacas; 1 cebolleta; 2 dientes de ajo; 2 limones; 250 g de carne picada de cordero;100 g de queso feta; 100 g de queso mozzarella; 4 yogures griegos; 1 cucharadita de harissa; aceite de oliva y sal.

Pon en un bol la harina, el agua, una cucharadita de sal y la levadura fresca. Mézclalo con cuchara y, cuando ya no se pueda con cuchara, amasa a mano durante 5 minutos. Pon la masa en un bol y tapa con un paño. Deja fermentando 30 minutos.

Pela y pica la cebolla y los ajos. Lava y pica las hojas de espinacas. Pon una sartén grande al fuego con un poco de aceite y con la cebolla y los ajos. Mantén al fuego hasta que empiece a coger color. Añade la carne picada y la harissa y mantén al fuego hasta que la carne se dore. Añade entonces las espinacas y mantén al fuego 2-3 minutos hasta que las espinacas queden blandas. Retira del fuego y deja enfriar.

Desinfla la masa, presionándola. Divide en 4 bolas y extiende éstas formando círculos. En el centro de dos de ellos, pon el relleno de carne y los dos tipos de queso bien picados. Humedece la zona exterior, pon sobre cada uno los otros dos círculos y sella bien los bordes plegándolos con los dedos. Pasa los panecillos por la sartén, 3 minutos por cada lado. Sirve con yogur griego y limón.